*Deplora el dirigente estatal del PES BC el enfrentamiento entre la alcaldesa Montserrat Caballero y el diputado SergiomMoctezuma
TIJUANA.- Lo ocurrido el pasado viernes entre un legislador y la primera edil tijuanense, es una clara muestra de que los gobiernos emanados de la cuatroté sólo sirven para promover la violencia, agraviar a las instituciones y no dar respuestas puntuales a los ciudadanos que demandamos seguridad en un país que se ha teñido de sangre como nunca en los últimos cuatro años y medio.
César Eduardo Hank Inzunza, dirigente estatal del Partido Encuentro Solidario Baja California (PES BC), dijo que si bien se podría suponer que se trata de montaje de los involucrados para distraer la atención sobre temas de relevancia, “es evidente que ambos eran de una misma corriente al interior del partido en el poder y hoy están totalmente fraccionados”.
Agregó que a nadie debe sorprenderle la actuación de la presidente municipal y del diputado en su calidad de representantes populares “toda vez que están acostumbrados a resolverlo todo con violencia, diatribas e intolerancia, y para muestra lo vemos todos los días por las mañanas en el soliloquio de Palacio Nacional”.
Apuntó que no llama la atención el “tan vergonzoso desencuentro” de dos personajes que provenían de la misma línea -ya que fueron impulsados por el mandatario de dos años- y hoy están totalmente divididos, erosionados y envueltos en desencuentros que más allá de afectar la imagen de Tijuana y de sus representantes populares, “demuestra que les falta oficio político y que violentan las instituciones sin consecuencias”.
En ese sentido, el líder del PES BC dijo que hoy los morenistas y petistas “están inmersos en luchas internas y buscando llevar agua a su molino”, tanto a título personal como a la corriente a la que pertenecen, “porque es evidente que todos van por alcanzar sus propias ambiciones, sin importarles que tienen una encomienda que les confirió la ciudadanía”.
Hank Inzunza agregó que se vulneró el derecho a la libre manifestación del legislador, -de la que gozamos todos los mexicanos- a manos de la autoridad municipal, pero también es una realidad que a falta de trabajo legislativo a favor de la ciudadanía se busca la controversia para llamar la atención y victimizarse.
Lo ocurrido, agregó es una clara muestra de lo que es y cómo se conducen los integrantes de la llamada cuatroté, que la única transformación que han logrado es convertir a México en un país en el que priva la violencia y la impunidad.
Destacó que es una obligación de la mandataria atender y escuchar todas las voces y reclamos, “y el diputado es uno más de sus gobernados, por lo que en lugar de mandarlo sacar como si se tratara de un delincuente, debió platicar y conciliar en aras de buscar una solución a sus demandas”.
Sin embargo, finalizó Hank Inzunza, recurrió a la fuerza pública para echarlo de la casa municipal y sus allegados optaron por descalificarlo y el legislador, en lugar de conducirse con sobriedad “se prestó a un espectáculo muy lamentable que demuestra la falta de altura de quienes deberían trabajar en fortalecer las leyes y las instituciones para regresar a Baja California el progreso y la seguridad”.